Elige tu aventura
Aquí os vamos a enseñar los cuentos que hemos hecho nosotros basados en un libro en que el lector elige su propia aventura.
El instituto misterioso
Libertad y Ángela
Tú estabas en el instituto y te gustaba un niño llamado Ángel. Desde el primer día te gustó, era muy guapo, agradable y atractivo.
Todo el mundo te decía que tú también le gustabas y tú te ilusionabas.
Luego, tus amigos empezaron a decirte que todo era una mentira y tu hermana lo sabía, pero no te dijo nada. ¡No te esperabas que tus amigos y tu hermana te defraudaran!
A la semana siguiente, vinieron a pedirte perdón y tú, como una ingenua, los perdonaste.
No sé cómo los pudiste perdonar. ¿Tú qué harás? Estás muy indecisa, no sabes qué hacer.
¿Creerás a tus amigos? No sabes si volverán a defraudarte. No sabes si podrás volver a confiar en ellos ...
Al día siguiente vinieron a preguntarte que si seguías enfadada con ellos y tú les dijiste que sí, que después de todo esto no les perdonarías. Ellos insisten. ¿Qué decides hacer?
1 Si los perdonas, vete a la página dos.
2 Si no los perdonas, vete a la página tres.
Página 2:
Has perdonado a tu amigos.
Ya estáis todos muy felices como estabais antes, todos de risas y con vuestras diversiones.
Y al pasar una semana empezasteis a salir Ángel y tú y a una niña le gustaba él y a Ángel le gustaba ella en secreto y Ángel te fue infiel.
Al día siguiente te lo dijo tu mejor amiga y tú te quedaste triste. Él y tú lo dejasteis y cada uno se fue por su lado.
No te lo podías creer. Tu novio te fue infiel. El amor de tu vida te fue infiel.
Página 3:
No has perdonado a tus amigos.
Tú no les has perdonado, pero ellos piensan que sí les has perdonado.
Entonces tú haces que te juntas con ellos, pero no crees en ellos porque lo que te hicieron no es normal.
Al día siguiente, te dijeron que si tú te ibas al cine con ellos y tú les dijiste que no ibas a estar con ellos porque lo que te hicieron no es normal.
Día de juegos
Cristian y Alejandro
Tú estabas en el parque jugando al fútbol, cuando de repente llegó un hombre, os quitó la pelota; pero no entendíais el porqué y el señor os contestó: "Aquí no se puede jugar al fútbol". Cuando llegasteis a casa vuestros padres os preguntaron: "¿Dónde está el balón de fútbol ? Y vosotros contestasteis: "¡Nos lo ha quitado un señor raro de la calle!"
¿Qué decides hacer?
1) Si decides volver a buscar al señor, vete a la página 2.
2) Si decides comprar un balón nuevo, vete a la página 3.
Página 2
Al día siguiente fuisteis al campo y os encontrasteis al señor que os quitó el balón de fútbol y le dijimos: "Danos el balón que nos quitaste ayer"; y él nos dijo: "No os lo voy a dar porque en el parque no se puede jugar al fútbol".Y tu padre se puso a hablar con el señor que os quitó el balón y tu padre le dijo: "¿Dónde está el balón de mi hijo?" y el señor le dijo: "No te lo voy a dar porque en el parque no se puede jugar al balón, porque hay gente mayor y les podéis dar y hacerles daño. Os lo voy a dar, pero no juguéis más en el parque, por favor". Y nosotros aceptamos.
Página 3
Al día siguiente fuisteis a comprar un balón nuevo azul. Y, al sacarlo, se pinchó.
FIN.
COSAS MISTERIOSAS (Lau y Sara).
Estabais una amiga y tú solas en casa; era una tarde lluviosa y aterradora. Cada vez llovía más y cada vez vuestro corazón latía más deprisa. De repente sonó un relámpago, los nervios os reconcomían. De repente sonó la puerta, cuando fuisteis a abrir no había nadie al lado de la puerta...¡AAAAAWWWW..! ¿¡Qué puede ser!?
¿Qué podéis hacer?
-1: Esconderos y esperar a que pase la tormenta (pág. 2).
-2: Llamar a alguien y que esté con vosotras (pág. 3).
Página 2:
Ya vemos que has seleccionado la página 2.
Os habéis escondido en la cama, este ruido cada vez os pone más nerviosas, la cama chirría como un sillón viejo. De repente ves que tu amiga ha desaparecido y la tormenta va a peor. Al instante la puerta se abre la puerta .¡ÑÑÑIIII! ¡ERA TU AMIGGAA!
Os abrazasteis y empezasteis a llorar de alegría
FIN.
Página 3:
Habéis decidido venir a la página 3:
Avisáis a vuestros padres, no os le coge, llamáis a vuestra madre y tampoco, vuestro hermano tampoco. Llamáis a vuestro cuñado y sí. ¡ESTÁIS A SALVO!
FIN